lunes, 10 de junio de 2013

Tómalo como un comienzo

Aunque un logro pueda parecer enorme, no es el mayor y definitivo, porque abre la puerta a nuevas oportunidades para conseguir cosas más grandes aún.
Es por eso que envidiar a alguien o sentir resentimiento por los logros de los demás carece absolutamente de sentido. Cada uno de sus logros aumenta el número de oportunidades disponibles para ti.
Alégrate con el éxito de los demás y estarás infundiendo en ti mismo la fuerza de ese éxito. Se agradecido por el verdadero progreso de alguien y te convertirás en parte de ese progreso.
Las personas más exitosas son aquellas que animan a otros y les permiten triunfar. Reconoce sinceramente el valor verdadero y descubrirás nuevas maneras de generar más valor aún.
La abundancia no tiene límites. Una vida vivida en plenitud y riqueza genera muchísima plenitud y muchísima riqueza en todos aquellos que la rodean.
Cada logro que ves, tómalo como un comienzo. Valora la riqueza que ya existe, y estarás generando más aún

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Alberto

Me alegro de ver que sigues "al pie del cañón"

Un abrazo y gracias desde la peni

Erika

Alberto J. Hernández G. dijo...

Hola Erika. Gracias por seguirme leyendo. Ya no le puedo dedicar tanto tiempo como antes, pero se hace lo posible. Espero que sigas bien en "la peni" ;-)